Sernapesca al día

Fauna marina sigue varando en nuestras costas pese a escenario de pandemia por covid-19

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Lunes 27 de Abril, 2020


Ajena a la contingencia mundial de la pandemia de coronavirus, la vida en los océanos parece seguir su curso normal. Pero quizá extrañadas por la poca presencia de humanos en las playas, algunas aves lesionadas o enfermas están apareciendo con mayor frecuencia en el litoral.

Fue el caso de un pingüino de Humboldt, que varó en Coronel a fines de marzo, y que fue rescatado por los profesionales del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura de la región del Biobío.

“Esta ave marina tenía herida la ranfoteca (pico), lo que le impedía cazar y alimentarse, así que requería internación, tratamiento y rehabilitación”, explicó Astrid Guerra, encargada de Gestión Ambiental de Sernapesca Biobío.

En tiempos normales, es decir, previo a las cuarentenas y cordones sanitarios por covid-19, la fauna marina herida era trasladada hasta la clínica veterinaria de la Universidad San Sebastián de Concepción, pero el centro en convenio cerró producto de la pandemia. “No tuvimos otra opción que adecuar una instalación en nuestra oficina de Talcahuano. Allí acondicionamos un patio interior para atender fauna marina, pusimos una piscina pequeña y laminas polarizadas para evitar que el ave se improntara (humanice) en el contacto con personas” agregó Guerra.

El ejemplar de Humboldt, fue rescatado pesando no más de 2,4 Kg, estaba muy débil, pero tratándose de una especie en riesgo de conservación, los funcionarios de Sernapesca que estaban en la modalidad de trabajo remoto, decidieron hacer turnos para medicar y alimentar a este pingüino.

Posteriormente la ave fue derivada al centro de rescate y conservación de fauna silvestre Ñacurutú, ubicado en Coliumo, comuna de Tomé, distante aproximadamente a una hora de la oficina de Talcahuano. Allí se ha mantenido hasta la fecha y ya ha subido de peso (más de 3 Kg). “Se encuentra gordito, bien alimentado, a la espera de ser operado con una prótesis que reemplace la ranfoteca inferior. La intervención médica será practicada por el Dr. Cristian Herrera, especialista veterinario y administrador del centro, que se mantiene sólo con aportes voluntarios y realiza una abnegada y gran labor”, dijo Astrid Guerra.

Se espera que una vez realizada la cirugía, y ante la evolución positiva del animal, pueda ser trasladado a un zoológico, ya que dada su condición no podría ser devuelto a su hábitat.

El pingüino comparte espacio junto a una gaviota y un cormorán. Aún no se anima a bañarse en la piscina, a diferencia del cormorán, del cual se ha hecho muy amigo, según cuentan los funcionarios de Sernapesca.